No te quedes al margen, pon tu experiencia al servicio de la Industria 4.0

Encontre “MOU-TE CAP A LA INDÚSTRIA 4.0: JA ESTÀ ACÍ, NO ET QUEDES AL MARGE”
No te quedes al margen, pon tu experiencia al servicio de la Industria 4.0

Joaquín Carretero, Sergi Belda y Javier Muñoz, expertos en transformación digital coinciden que las personas son el elemento clave de la transformación digital, pues con su conocimiento y la experiencia aportan valor fundamental a la Industria 4.0. A esa conclusión llegaron los asistentes al encuentro “MOU-TE CAP A LA INDUSTRIA 4.0: ja està ací, no et quedes al marge”, organizada por el Acuerdo Territorial para el Empleo y el Desarrollo Local, Actaio, a través del Programa Experimental II, el 12 de julio de 2018 en Ontinyent. 

Joaquín Carretero, consultor y diseñador de proyectos de Industria 4.0 y Smart Cities, en su ponencia: “El eje de la Industria 4.0: Las personas” realizó un recorrido por las distintas etapas de la revolución industrial. Precisó que el inicio de la cuarta revolución industrial lo marca la confluencias entre las tecnologías de la información (IT) y las tecnologías de producción (OT Operation Technology).

“Es ahí cuando explota todo, las empresas cambian su forma de hacer las cosas, tienen que adoptar la tecnología de la información esto hace ir más allá de la automatización que ya caracterizaba a la la Tercera Revolución industrial”. Carretero nos cuenta que hasta 2015 las tecnologías IT y OT habían evolucionado por separado y a distintas velocidades, pero al confluir y comenzar aplicarse juntas en los procesos y relaciones de la industria, detonan el antiguo modo de hacer las cosas y nace la Industria 4.0.

“La industria 4.0 es una forma de hacer las cosas distinta a como se ha estado haciendo. Aquellos que lo logran hacen las cosas de una forma menos costosa, más ágil y más flexible, al final esto les permite competir porque están preparados para modificar el producto con solo apretar un botón” 

Joaquín Carretero destacó la relevancia de la evolución acelerada que ha experimentado el teléfono móvil y cómo ha influido en nuestra forma de consumir, transformándonos en un nuevo tipo de cliente al que la industria tiene que responder con productos adaptados a nuestras demandas: el Cliente 4.0.  ¿Qué es lo que quieres el cliente 4.0? se pregunta Carretero, “lo que queremos es buena calidad a bajo coste, si puede ser me lo personalizas y además lo quiero ya. Esto es muy complicado de hacer. Para ello hay que reducir el coste, mantener o mejorar la calidad y además hacerlo pagando los sueldos más altos posibles”.

Como profesionales, asegura Joaquín Carretero “podemos tomar esto como un reto, pero también hay que verlo como una oportunidad. Hay un cambio que se está produciendo ya, en todo lo que nos rodea y hay muchas opciones de poder meter cabeza y posicionarnos ante el cambio que es inevitable, es muy difícil volver atrás”. Pero, como sostiene Carretero “La industria 4.0 no se puede comprar a kilos, la industria 4.0 hay que personalizarla porque el conocimiento de los trabajadores es el que se va a transmitir a las máquinas, en estos procesos digitales participarán con su conocimiento los operarios, así como todo el personal de la empresa”. 

“Digitalizarse es estar preparado”

Para embarcarse en la Transformación digital todos los empleados necesariamente deben tener más interacción con la tecnología, ser capaz de resolver problemas autónomamente, cooperar y asumir cada situación como un reto que hace posible mejorar. Para las empresas será indispensable crear unidades que guíen esta transformación digital.

Advierte que “para digitalizarse hace falta un visión, una motivación, habilidades, recursos, implantación,  infraestructura, pero sobre todo formación”. En este caso Carretero destaca la importancia de las profesiones conocidas como STEM (por sus siglas en ingles: Science, Technology, Engineering and Mathematics) en todo el proceso de transformación digital.

“La tendencia es la especialización y  hablar inglés es necesario porque es el idioma de la tecnología”

“Se generarán oportunidades laborales para responder a necesidad de personal con conocimientos en tecnologías como infraestructura, redes inalámbricas, protocolos de comunicación, computación en la nube, Internet de las cosas, interfaces inteligentes, robótica, impresión 3d, desarrollo de Apps y software para conectividad y movilidad, procesamiento y análisis de datos y la inteligencia artificial que es lo que dará paso la quinta revolución industrial donde las máquinas piensen por sí mismas y se enseñen unas a otras.”

A juicio de Joaquín Carretero hay un espacio donde las personas debemos fortalecernos como parte del proceso de transformación digital, en la creación. “Creando ideas, siendo originales, siendo disruptivos, viendo cómo mejorar, cómo el usuario se va a sentir mejor”. Para ello se necesitará también profesionales que interpreten la gran cantidad de información que se generará con los datos recogidos y procesados, para relacionarlos con las necesidades y características de los distintos clientes.

“Si pensamos que es lo que viene entonces podremos labrar nuestro futuro”

Joaquín Carretero finalizó su ponencia citando a la frase de Bill Gates  “El secreto del éxito en los negocios está en detectar hacia dónde va el mundo y llegar ahí primero” y recordó a Peter Drucker cuando aseguró que “La mejor manera de predecir tu futuro, es crearlo”. Reflexionando al respecto, Carretero señaló que es necesario que “pensemos hacia donde van las cosas y en este sentido el futuro laboral sería hacia dónde van los puestos de trabajo para empezar a formarme. Si soy capaz de crearme un futuro, de adelantarme a lo que viene y no depender tanto de lo que hagan los demás, pues evidentemente voy a ser mucho más fuerte”.

En cuanto a las empresas, Joaquín Carretero aseguró que “el éxito futuro de las organizaciones consiste en tener un buen equipo para poder crear ese futuro y que para ello tienen que pensar en las personas que harán ese futuro posible”.

Al final el know how lo tiene ese trabajador

Imasd es una empresa de perfil tecnológico que aunque trabaja con máquinas, desde sus inicios en 2001, busca la conexión con las personas, como sostiene su director Sergi Belda Navarro, ingeniero en telecomunicaciones. “Buscábamos conectar mejor con las personas, abstraer la complejidad de las máquinas gracias a que el manejo fuese sencillo. Por esta razón cuando nos enfrentamos a un proceso de automatización lo primero que hacemos es conversar con las personas involucradas en esos procesos“.

En Imasd trabajan en su división de fabricación de maquinaria industrial para el sector textil exportando casi toda su producción a más de 12 países. Mientras que en su división de robótica son fabricantes del Robot I+Delta en el que han aplicado todos sus conocimientos sobre el sector industrial y sobre tecnología para “solucionar los problemas del día a día que hay en las empresas sin perder de vista a las personas, porque las personas son super importantes”.

Belda asegura que el reto para las industrias del territorio es analizar qué procesos son susceptibles de automatizar, a través de auditorías de procesos para determinar por dónde comenzar. Para ello es importante tomar en cuenta a sus trabajadores porque son sus clientes internos, “todos los procesos de transformación digital llevan inherentes un proceso de transformación interna… hay que diseñar esto procesos adaptandolos a las personas que hay dentro y adaptandolos a los perfiles”.

Insistió que el cambio en los sistemas productivos animará a la industria local a aplicar procesos de transformación digital. “Antiguamente aquí se producía a grandes lotes, a grandes tiradas, todo esto se ha ido a producir a otros países y aquí se han quedado tiradas pequeñas de productos personalizados como los demanda el mercado y para eso necesitan transformar sus procesos. Al final la industria 4.0 está basada en pilares como la modularidad, permite trocear los procesos, implementar un sistema para cada uno de ellos, para que los cambios de modelo sean ágiles”.

En cuanto a las personas, Sergi asegura que con la automatización en la Industria 4.0 las personas van a hacer falta a todos los niveles, “por supuesto los puestos que más se van a castigar son los que menos valor aportan, los más repetitivos, los trabajos de mucha carga física o que implican riesgos”. Agrega que estos puestos de trabajo son lo que se van a transformar, por eso habla de la “dignificación del trabajo” pasando a gestionar y manejar las máquinas.

Por ello Belda resalta la importancia de reconocer el valor de la experiencia de los trabajadores  porque son ellos los que manejan la información necesaria, basada en su experiencia, para llevar adelante las mejoras en la producción que permiten las nuevas tecnologías. “Nosotros con los primeros que hablamos son con ellos, nos vamos a pie de línea y hablamos con el trabajador que está todo el día allí porque es el que más sabe del proceso, el que más pistas te puede dar de como automatizarlo y normalmente también es el que se queda con la línea automatizada, entonces cuanto antes empiece a aprender, mejor”.

“Es necesario empezar transformando de adentro hacia afuera”

Cuando Belda compartío con los asistentes su experiencias en los procesos de transformación digital señaló que aunque lo que primero te encuentras es la resistencia, por que los trabajadores creen que van a perder su puesto es importante que se trabaje en la comunicación interna para que se entienda que mientras más eficiente es la empresa mejoran las condiciones del trabajador beneficiando a todos. “Las empresas lo que buscan es ser más ágiles, ganar mercado, producir de forma más eficiente y si la empresa es más eficiente puede pagarles mejor a sus trabajadores, tratarlos mejor, al final es un círculo que es bueno para todos”.

Ante la pregunta cómo insertarse en las empresas de la Industria 4.0, Sergi Belda Navarro  presentó a los asistentes al encuentro dos alternativas insistiendo que al final es una cuestión de aportar valor. “Puedes poner los conocimientos que tienes a disposición de una empresa que esté apostando por estas nuevas tecnologías y formarte en alguna de ellas para aportar valor o por otro lado crear una iniciativa particular que puede desarrollarse a través de una startup”. Destacó que para estas iniciativas existen muchas oportunidades de financiamiento y de asociarse con pequeñas y medianas empresas interesadas en colaborar.

Conocer las tecnologías y trabajar sobre la base de conocimiento que se tiene para sacarle provecho a la experiencia.

Javier Muñoz Giner es ingeniero en telecomunicación y director de Tag Ingenieros una empresa de Base Tecnológica ubicada en Ontinyent. Desde 2007. Esta empresa trabaja ofreciendo soluciones a sus clientes aplicando las tecnologías de identificación automática, Tag Ingenieros es líder en España en soluciones RFID utilizando el Know How adquirido en el desarrollo de proyectos de I+D para aplicarlo a dispositivos RFID y aplicaciones software RFID desarrolladas por su departamento de investigación según las necesidades del mercado.

Para Javier Muñoz, las posibilidades de empleos generadas por la cuarta revolución industrial que demanda la Industria 4.0 se puede encontrar en dos tipos de empresas. Por un lado,“ las empresas tecnológicas que lo que hacen es desarrollar tecnología para las industrias 4.0 para generar este núcleo de industria 4.0, en las que si quieres entrar en ese mercado laboral lo que tiene que hacer es formarse desde un punto de vista tecnológico con una mentalidad muy abierta”.

Y por otro lado están las otras empresa, esas que en algún momento deben abordar la implantación de esas tecnologías 4.0. En estas últimas Muñoz señala que existen varios opciones con distintos tipos de empleos en función de la posición que se quiera desempeñar. “Desde el personal directivo que tiene que tener una visión tecnológica amplia y tiene que decidir apostar en todo o en parte por esta industria 4.0, desde los ejecutivos o mandos intermedios que tienen que saber interpretar toda esa información que les dan desde la industria 4.0 porque si no la interpretan no la podrán utilizar para nada y después, están las otras personas, esas que tienen el conocimiento de la fabricación y del desarrollo del producto que tienen que acostumbrarse a convivir con la tecnología”.

¿Qué implica para los operarios convivir con la tecnología?, según Javier Muñoz “primero no tenerle miedo a que va a quitarte el trabajo, segundo no tenerle miedo a darle la información a la maquina que tu tienes y tercero dejar en sus manos determinadas partes de automatización que ya se van haciendo en la que los sensores aportan ya esa información”. 

Es fundamental para Muñoz un cambio de mentalidad en estos trabajadores pues deben de confiar en trabajar con las máquinas con la misma naturalidad y confianza con la que utilizan sus móviles. Solo así será posible, insite Javier Muñoz, “dar cabida a tecnólogos o especialistas en ciertas tecnologías pero también pone en valor la experiencia específica de los obreros con larga experiencia en producción. Pero lo que es importante es conocer las tecnologías y trabajar sobre la base de conocimiento que ya se tiene para sacarle provecho a ese expertice y aportar valor a las empresas en los procesos de transformación digital.”

En definitiva, el valor de las personas en la Industria 4.0 lo determina la contribución que, desde su experiencia previa y gracias a las formación contínua, pueda realizar al proceso de transformación digital por eso te invitamos nuevamente a que “MOU-TE CAP A LA INDUSTRIA 4.0: ja està ací, no et quedes al marge”